El pasado 2 de abril, Xiaomi invitó a los medios de comunicación a visitar su parque industrial de Foxconn, una gran factoría donde entre otros, se ensambla y produce el actual buque insignia, Xiaomi Mi 9. Recordemos que de las 3 fabricas principales, esta línea de producción de Foxconn es la más importante, por lo que de forma muy probable, tu nuevo Xiaomi Mi 9 proceda de ella.
Recordemos que al parecer, Xiaomi se topó con un gran número de impedimentos en el proceso de ensamblado de su nuevo buque insignia, haciendo que la línea de producción se haya visto afectada y por lo tanto no se haya podido satisfacer la demanda actual del mercado. Posiblemente este haya sido el motivo del que no hayamos podido ver hasta este próximo día 5 de abril, la versión en color azul y violeta del Xiaomi Mi 9.
En la primera fotografía que nos muestra Xiaomi de la linea de producción del Mi 9 podemos ver uno de los robot automatizados que sueldan e integran todos los componentes internos del buque insignia. En concreto, según ha especificado la marca, en esta fase del trabajo, los empleados tan solo realizan tareas de verificación y colocación de los componentes en la zona de trabajo de dicho robot.
Cada robot de este tipo puede alcanzar un nivel de producción de hasta 8.000 placas base de dispositivos móviles en un solo día, ya que este consigue mediante un flujo de trabajo bastante elevado soldar cada uno de los componentes de dicha placa y posteriormente aplicar el suficiente calor para que estos terminen totalmente sellados.
Los empleados de la linea de producción toman su protagonismo en el proceso de colocación sobre la estructura del terminal de su placa, pantalla, cámara, altavoces, batería y como no, la gran novedad de la gama Mi de Xiaomi, la bobina de carga inalámbrica que en este caso alcanza los 20W.
El último paso que se lleva a cabo es el de la colocación de su parte trasera fabricada en vidrio. Un proceso extremadamente preciso ya que se ha de conseguir que dicho recubrimiento en vidrio encaje de forma muy ajustada al cuerpo principal del terminal.
A continuación, una vez el Xiaomi Mi 9 está completamente montado, este «sufre» varias pruebas de estrés, tal y como podemos ver en la imagen superior. Un proceso que sería muy similar al que realizan las principales plataformas de benchmarks como AnTuTu y GeekBench.

Una vez finaliza el testeo del Xiaomi Mi 9, este se le aplica el recubrimiento P2i, una proceso que hace que el terminal, aunque no cuenta con su certificación debida convirtiéndolo en un smartphone resistente al agua, si que cuenta con este recubrimiento hidrófugo en su superficie que lo hacen repelente a los líquidos. Este proceso dura en torno a 3 horas.
Una vez finalizado el proceso de recubrimiento P2i, se comprueba en una fase final el funcionamiento de la pantalla y las cámaras del terminal, para posteriormente colocar las diferentes pegatinas de especificaciones y certificaciones con las que cuenta, en este caso, el Xiaomi Mi 9.
Una vez se encuentra listo el terminal, la linea de producción de Foxconn lo almacena temporalmente en un área de almacenamiento hasta que posteriormente se envían a los diferentes proveedores.
vía | Gizchina